El auto del juez Garzón sobre su autodeclarada competencia para investigar los crímenes contra la Humanidad durante y después de la Guerra Civil tiene elementos que permiten entrever el afán de protagonismo de su autor.
En primer lugar, el escrito de Baltasar Garzón ocupa 68 páginas, aunque el juez utiliza un cuerpo 14 de Times, un interlineado de 1,5, párrafos enteros en negrita y unas sangrías en algunos de ellos de hasta 1,9 centímetros, como los malos estudiantes que quieren alargar sus trabajos. Con un cuerpo 12 (más que suficiente) e interlineado sencillo se queda en 37 páginas, sin tocar las sangrías. Y se lee más fácilmente. Su capacidad de trabajo no se pone aquí en duda, pero sí en sus justos términos.
Por otro lado, Garzón ordena abrir la fosa donde muy probablemente están los restos de Federico García Lorca, lo que le asegura algunas líneas en las biografías del poeta, que no es poco.
Y por último, pide el certificado de defunción de Francisco Franco y otros 34 imputados por estos delitos para comprobar que están muertos y dar así por extinguida su responsabilidad penal. Y la justicia, mientras, hecha unos zorros.
viernes, 17 de octubre de 2008
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Para dar lecciones de historia y escritura, has publicado tu entrada descuidando por completo el titulo de la misma. Es Garzón, no Gazón.
ResponderEliminarY no creo que este hombre haga lo que hace por el afán de aparecer en los libros de historia, tan solo creo que aquellos que perdieron a un ser querido entonces, tienen derecho a saber donde se encuentran y a darle digna sepultura.
Cualquiera que pierda a un ser querido, sea de la forma que sea, ansia tener al menos un lugar y un cuerpo al que poder rendir homenaje cuando así lo deseen.
No es afán de protagonismo, es afán de hacer justicia para con los olvidados.
Gracias, Sergio. Ya está corregido. Nada más lejos de mi intención que dar lecciones de nada. Un saludo.
ResponderEliminarJavier, no era mi intencion resultar arisco en mi respuesta, pero creo que es injusto que juzguemos a las personas y sus actos tan a la ligera y buscando siempre el lado mas oscuro de los mismos.
ResponderEliminarNo puedo negarte que son muchos los que hacen y dicen cosas a sabiendas de que asi quedaran por siempre en la historia de nuestro pais o en la historia de nuestro mundo, pero no todas las personas son iguales, por ello y partiendo de que aunque yo no perdi (que yo sepa) a nadie durante la guerra civil o el franquismo, no puedo sino dar todo mi apoyo a quienes si sufrieron la ausencia obligada de las personas a las que querian.
Un saludo.
Lo que ocurre es que hay una ley de la Memoria Histórica que permite recuperar todos los restos y buscar a los desaparecidos sin necesidad de movilizar un juzgado, funcionarios, policía judicial, etc, que bastante trabajo tienen. A mí me parece que iniciar por eso un proceso contra Franco, imposible al estar muerto, a estas alturas es querer dar la nota. Mañana podría iniciarlo contra Hitler. Destacar las extravagancias de Garzón no es estar contra la búsqueda de los desaparecidos. Lo de Pinochet estuvo muy bien porque aún estaba vivo, pero a los genocidas muertos ya no se les puede sentar en el banquillo.
ResponderEliminarHasta donde yo he entendido Garzon ha solicitado que se investiguen a los que fueron militantes de la falange durante un periodo determinado de tiempo.
ResponderEliminarSe tomarian medidas legales contra todo aquel que ESTE VIVO. Evidentemente no va a sentar en el banquillo a Franco, pero si alguno de los que participaron en los secuestros y posteriores asesinatos de los caidos sigue con vida, que lo pague, aunque tengan 100 años.
Por cierto y esto no deja de ser mi opinion personal, en españa no faltan jueces, faltan togas.
Un saludo.
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