Sirva esta entrada para recordar que los diputados, senadores y parlamentarios autonómicos españoles llevan un mes de vacaciones y les quedan otros 11 días. Como lo lees. Además de subirse el sueldo cuando les da la gana y de haberse otorgado el derecho al 100% de la pensión con 11 años trabajados (el resto de los españoles necesitamos 35), los parlamentarios tienen tres meses de vacaciones al año, enero, julio y agosto (más Navidad y Semana Santa), según se encargaron de consagrar ellos mismos en la Constitución, artículo 73.1. Este artículo, por cierto, no está entre los que manejan los partidos para la reforma constitucional.
Es cierto que algunos diputados trabajan en enero, unos 50, los de la diputación permanente, pero cobran aparte por trabajar en vacaciones. Y no debe ser poco, porque todos quieren trabajar en estas fechas.
martes, 20 de enero de 2009
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Parece que apelar al "ruido de sables" de la Transición y a lo mal que estábamos con Franco, cada vez convence a menos gente de que el actual sistema, aunque mucho más avanzado, sigue siendo demasiado clasista y oligárquico.
ResponderEliminarCuando los administradores públicos conforman una casta con mejores condiciones de vida amparadas por la Constitución, a su servicio, es que algo funciona y aquello de la "igualdad", como que sólo vale para los mitines...
Buen artículo y buen blog, un saludo.