Vuelven a intentar darme de alta en un servicio, esta vez Endesa

Me llama una amable comercial de Endesa, de acento extranjero, para regalarme un 10% de descuento en el gas si contrato un servicio de mantenimiento. Lo rechazo amablemente pero le dejo que intente convencerme (error). Como el guión está preparado para que uno no pueda decir que no sin caer en la descortesía, acabo aceptando que me envíe el contrato por escrito y, si me gusta, lo firmo y me doy de alta. "Pero que quede muy claro que el hecho de pedir el contrato para leerlo no significa que me dé de alta", recalco. "Si claro, usted no se da de alta hasta que devuelva el documento firmado", aclara. Pero en lugar de cerrar ahí el acuerdo y la conversación, añade:

-Por último, para enviarle el contrato tenemos que realizar una breve grabación.
-Ni de coña, yo no grabo nada (si te graban te dan de alta, lo tengo comprobado).
-Son sólo tres preguntas.
-¿Qué preguntas?
-La primera es si usted conoce las condiciones y está de acuerdo con ellas.
-Pero si no las he leído.
-Se las he contado yo...

Diez minutos después de descolgar el teléfono pido disculpas a la señorita de acento extranjero por haberle hecho perder el tiempo y me despido.

Añado Endesa a la lista de compañías que han intentado, y a veces logrado, engañarme: Jazztel, Orange, Patagón, Movistar, Ya.com, Telefónica.